14 jun 2016
Y cómo puede sacar ventaja de ello tu tienda.
14 jun 2016
Y cómo puede sacar ventaja de ello tu tienda.
Los “millennials” —la generación de aquellos nacidos, más o menos, entre los años 1981 y 2000— ya son oficialmente la mayor generación en la historia de EE. UU., pero no gastan tanto dinero como sus padres.
De acuerdo con este estudio de Harris, los millennials no siempre consideran que comprarse una casa o un coche sea un hito en sus vidas, al contrario que las generaciones anteriores. En vez de eso, prefieren destinar su dinero —estimado en más de un billón de dólares— en acumular recuerdos antes que posesiones. Compran experiencias, no productos.
Es una buena noticia para todos los que se mueven en el negocio de las experiencias, incluidas las tiendas de juegos.
¿Y cómo puedes aprovechar esta cualidad?
El mismo estudio dice que este apetito de experiencias sobre productos está motivado, en gran parte, por el miedo a estar perdiéndose algo.
La Presentación de Sombras sobre Innistrad en IMAGINE! Hobbies & Games incluía música en directo, bailes y comida aportada por todos.
El 70 % de los entrevistados dijeron que les preocupaba perderse momentos importantes: un viaje fabuloso, un concierto legendario. Esa preocupación les empuja a acudir y a compartir su experiencia con los amigos.
Míralo como si fuera una economía de la escasez. Para los millennials (nota: quien escribe esto es parte de ellos), el comercio electrónico es la norma, y ningún producto es imposible de encontrar. ¿No quedan entradas para el concierto? Siempre está la reventa. ¿Te perdiste la edición limitada? Puedes comprarla con una huella digital.
No ocurre lo mismo con las experiencias. Si no voy a tu draft de medianoche de Conspiracy, no puedo pedir otro por Internet. Puedo comprar una caja de Modern Masters—Edición 2015 con unos pocos clics de ratón, pero no puedo comprar un asiento en el Grand Prix Las Vegas 2015. Las experiencias son intrínsecamente urgentes.
Así pues, ¿cómo puedes hacer para incluir esta urgencia en tu estrategia de marketing?
El miedo a perderse algo no está motivado por los factores habituales.
No tiene detrás un suministro limitado o una fecha límite. Es la oportunidad de crear recuerdos irreemplazables, de conocer amigos nuevos, de sentirse parte de la comunidad. Empieza por pensar en esa oportunidad como en la materia prima que ofreces.
Pongamos como ejemplo la Presentación de medianoche de Sombras sobre Innistrad en IMAGINE! Hobbies & Games.
El propietario Jay Morgan vendió el evento como una fiesta de Halloween con música en directo, baile y comida aportada por los asistentes.
En las horas anteriores al evento, Jay fue creando expectación en las redes sociales centrándose en la experiencia social —los disfraces, el concurso de baile, los dulces— antes que en el producto.
Después se envió un artículo en retrospectiva a los suscriptores del boletín de noticias: el recuerdo de una noche inolvidable o un recordatorio de la oportunidad perdida, según si estuviste allí o no. Y debajo del collage de fotos había una invitación a la próxima fiesta: la celebración del décimo aniversario.
La campaña fue un éxito porque se centraba en la auténtica proposición de valor del evento, que no son los sobres, sino la creación de recuerdos; no son las raras míticas, sino la alegría de una experiencia compartida y única.
¡Ten su ejemplo en mente con Luna de horrores!